CARTAS
SOBRE LA MESA
Foto tomada de Vanguardia Liberal
“La dirigencia se ha aprovechado de la pobreza del norte”
El ‘Angel del
Norte’ es Albeiro Vargas. Hace años había oído su historia: El niño que servía
a los ancianos más vulnerables de ciudad norte. Y allá, en esa ciudad, en la
Bucaramanga de la que poco se habla, me encontré con él. Su Fundación ‘Albeiro
Vargas y ángeles custodios’ ayuda a niños y adultos mayores de los barrios más
vulnerables. Albeiro ya no es tan joven. Por más de 30 años ha visto crecer ‘el
norte’ de la urbe. Con él me senté a hablar de los políticos, del gobierno, del
Estado. La Bucaramanga ‘que pone
Alcalde’ no sólo quiere hablar de política en época electoral.
MANOLO AZUERO: Albeiro, en su
opinión, la de un doliente de ciudad
norte, ¿Qué tanto reconoce la clase dirigente los problemas de este sector de
Bucaramanga?
ALBERIO VARGAS: Mire yo recuerdo de políticos
que venían a dar muñecas o juguetes y
sólo por ello recibían el apoyo de la comunidad. Muchos aún siguen en el poder.
Lamentablemente la dirigencia se ha aprovechado de la pobreza del norte. No se
ha hecho mucho más. La gente les aprecia porque calman el hambre, de un día, de
una semana. Pero el problema del norte no es dar de comer una tarde, es de
posibilidades de educación o de trabajo. Yo conozco muchas personas de aquí, yo
soy uno de ellos, que nacimos en una invasión pero hoy somos profesionales ¿Por qué? Porque tuvimos una oportunidad,
logramos surgir. Sin embargo la gran mayoría de la gente no tiene esa
oportunidad.
M.A.: ¿Lo que usted me dice es
que los políticos manipulan las necesidades de los habitantes del norte con
fines electorales?
A.B.: La gran mayoría sí. Dan de comer
para un favor político, pero así no solucionan los problemas de estas familias
que lo que quieren es trabajo, formar a sus hijos y educarlos. Claro nos dan un
mercado, una ayuda pero no más. Yo he sido víctima de eso como Fundación. Me
buscan y preguntan ‘¿Qué necesita que le regalemos para que nos apoye?’.
Siempre les he dicho que yo no vendo mi conciencia, ni a mis ancianos. Aquí
necesitamos son políticas públicas para que la obra social no dependa de
limosnas.
M.A.:
Los mariachis, los bailes, las fiestas de navidad o de la niñez, que financian
los gobiernos locales ¿Qué tanto le sirven a ciudad norte?
A.B.: Le repito. Eso es de momento.
Una fiesta le puede valer a la Alcaldía de Bucaramanga 200 millones de pesos un
día. ¿Y el resto de días? ¿Qué comen los abuelitos? Ellos siguen viendo
pobreza. Por ejemplo, yo critico esos programas donde les regalan cajas de
dientes. ¿La caja sola para qué? ¿Para que se muerdan la lengua? Antes de
cualquier otra cosa, se necesita que a todos los ancianos se les garantice una
alimentación balanceada. Hay que crear restaurantes para el adulto mayor. Aquí
hubo en una época pero se quitaron. Y he ahí otro inconveniente. Cada gobierno
trae un programa diferente. Uno que el vaso de leche, el otro que las cajas de
dientes, el siguiente que las gafas. ¿Gafas para qué? Para que sigan viendo
miseria. Así no se soluciona nada. La solución debe ser de raíz. Hay que crear
política social no programas que van y vienen. Debe haber continuidad y
compromiso oficial. Aquí también se habla de una pensión para los viejitos de 45
mil pesos. Les toca hacer fila desde las 4 de la mañana para reclamarla. Y dígame ¿Para qué alcanzan 45 mil pesos?
M.A.: Los adultos mayores han
sido su mayor desvelo. ¿Qué opina de los
Concejales del municipio que aprobaron descontar la estampilla pro anciano, en
detrimento de los más necesitados y en beneficio de un particular?
A.B.: Ellos se equivocaron y
manipularon una estampilla que es nacional. Pero déjeme anotar algo más grave.
Políticos santandereanos manipularon no la estampilla, pero la Ley 687.
Antiguamente esta Ley le daba el 80% del recaudo de pro anciano a los
ancianatos y el 20% a los grupos vida, grupos de adultos mayores que se reúnen
en los parques. ¿Qué hicieron? Modificar la Ley, dejando el 70% de los recursos
a los grupos y solo el 30% para los ancianatos. Esto generó caos, desmejoró la
calidad de vida de los adultos mayores, se empezaron a cerrar ancianatos,
muchos ‘viejitos’ quedaron a la deriva.
M.A.: ¿De qué
políticos santandereanos me habla?
A.B.: Iván Moreno Rojas y el
secretario de Gobierno de Bucaramanga, René Garzón, en compañía de otros más.
M.A.: Varios
diputados de Santander y el ex Gobernador Horacio Serpa, han sido cuestionados por la Procuraduría por
el no cobro de la estampilla para el bienestar del adulto mayor. ¿Se olvidó la
clase política de los ancianos?
A.B.: Yo resalto la labor de la
Asamblea, pues ha sido más cercana a esta problemática. Ahora ellos exoneraron
el cobro algunos contratos de la estampilla, cosa que no debían hacer. Por esa
razón nosotros demandamos, ganamos la demanda y esa ordenanza se cambió. Eso lo
hicimos como asociación, aquí en Santander estamos agremiados 56 ancianatos que
atiendan a 5500 abuelitos.
M.A.: Los transportadores, los
comerciantes, los industriales, los zapateros,
todos hacen lobby ante el Estado para defender sus intereses. Usted me dice
ahora los ancianatos están asociados. ¿Qué han logrado con ello? ¿Si lo oye el poder?
A.B.: Los abuelitos que estaban
desamparados, abandonados por sus familias, ahora tienen quien los defienda.
Esta agremiación ha logrado un impacto. ¿Cuál? Los abuelitos ahora tienen
SISBEN, ARS, un servicio fúnebre. Además hemos presionado al Estado para cumpla
la Ley 1276 que se refiere a la estampilla para el bienestar del adulto mayor,
para que giren los recursos que le pertenecen a los ancianos más vulnerables.
M.A.: Albeiro, la Alcaldía de
Bucaramanga en los últimos años ha patrocinado Fundaciones de papel. Su
Fundación, que por supuesto no es de garaje, y tiene una trayectoria
reconocida, ¿Qué apoyo ha recibido por parte del municipio?
A.B.: Nosotros nunca hemos tenido
convenios del municipio, porque a ellos no les interesa. ¡Claro que los hemos
pedido! Y la respuesta de la Alcaldía y de la gobernación es que no tienen
presupuesto. Así las cosas, no entendemos como en Diciembre salen contratos de
100 millones de pesos para mariachis, fiestas y juegos, cuando a nosotros nos
dicen que no hay presupuesto para tener un medico en nuestras instituciones o
para mejorar la alimentación del adulto mayor.
Ellos alegan que para eso es la estampilla, pero para lo que se necesita
ese rubro es poquito. Y debo aclarar que la estampilla es una Ley, no es
potestad de la Alcaldía destinarla. Es decir que de su propio presupuesto el
municipio no destina cursos importantes para los ancianos.
M.A.: A usted se le
conoce como Angel de Norte, porque desde niño ha servido al adulto mayor, ha
cuidado a los ancianos más vulnerables de esta ciudad. ¿Qué hizo de usted lo
que es?
A.B.: Ese sobrenombre se le debe al
periodista Euclides Ardila. El hizo sus prácticas acá y cuando venía solo veía
violencia, miseria y todo tipo de problemas. En ese contexto se encuentra a un
niño jugando con los abuelitos. Y él dice ‘por fin algo bueno, hay un ángel’.
Ahora, lo que me animó a trabajar con los ancianos fue haber crecido en ciudad
norte. Conocer la pobreza, el dolor, el llanto, ver niños en la calle, abuelos
pidiendo limosna. Yo viví con mi abuelo de más de 80 años por mucho tiempo, lo
cuidé siendo yo un niño, hablaba mucho con él. Cuando muere quedó un vacío, y
empecé a buscar abuelitos vecinos. A los 11 años tenía ya 20 o 30 ancianos que
visitaba todos los días. Después eso se convirtió en mi proyecto de vida que me
ha permitido servir a los adultos mayores, valorar que ellos son la historia de
este país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario