Esta historia, pone a pensar a más de un Cartagenero sobre el vuelo de la María Mulata, y a cuestionarse si de pronto, en las pasadas elecciones, solo vivieron una falsa ilusión. Noches de Cartagena, toda una serenata contractual
Judith Pinedo, la Alcaldesa de Cartagena, llego al poder reconocida bajo el sobre nombre de la María Mulata. Encarnaba la esperanza, la lucha contra la politiquería y el clientelismo. Inscribió su candidatura avalada por 161.514 firmas, y en Octubre del 2007 fue elegida con 115 mil votos, venciendo a Nicolás Curí, referente de la política tradicional de la ciudad amurallada.
Hoy, después de casi 40 meses de gobierno, la ilusión de su causa parece haber entrado en decadencia. La Revista Dinero la incluyo en su caratula sobre corrupción en el país, Pinedo respondió asegurando que la publicación faltaba a la verdad y reclamo que las criticas debían estar basadas en hechos concretos. La semana pasada se destaparon en el Concejo presuntas irregularidades en la contratación del Establecimiento público ambiental de Cartagena, EPA. El debate puso en tela de juicio un contrato de consultoría, lleno de inconsistencias, que no es más que el primer capítulo de una serie de malas costumbres administrativas. Las cuales no parecen ser coherentes con el discurso que promovió la Maria Mulata en las calles de la heroica durante las pasadas elecciones. Esta es la historia, con un nuevo capítulo que oscurece aun más el caminar de la Alcaldesa y sus funcionarios.
El pasado Diciembre una especie de terremoto de contratos se vivió en el EPA. En un mismo día, la saliente directora de la entidad, Ruth Maria Lenes, hoy asesora de la Alcaldía para asuntos ambientales, adjudico contratos por más de 1000 millones que agrietan el compromiso de la Alcaldesa y su gestión con la transparencia en la contratación, y cuestionan la correcta ejecución del patrimonio público por parte de los funcionarios públicos de la capital de Bolívar.
Para empezar esta el contrato numero 253, por valor de 614 millones, adjudicado el 23 de Diciembre de 2010 a la Unión Temporal Censo Arbolado de Cartagena. El cual tiene como objeto establecer precisamente el inventario de arboles en la ciudad. Las particularidades del contrato merecen varias críticas. Expertos en el tema aseguran que a través del apoyo a una tesis universitaria, con un convenio interinstitucional, este contrato podría haberse desarrollado por la mitad del valor actual, lo que representaría un ahorro de cientos de millones para la entidad pública. Posibilidad bloqueada por unos pliegos de condiciones que sospechosamente descartaron a potenciales licitantes, y que dejaron como único proponente del concurso a la Unión temporal referida anteriormente. Incluso en el los pasillos del concejo municipal se ha señalado que los pliegos habrían sido diseñados a la medida del contratista electo.
A lo anterior se suman otras infortunadas características del proceso de contratación. Entre la fecha de apertura y cierra del concurso de merito 005, por medio del cual se desarrollo el contrato en cuestión, no hay más de16 horas laborales de diferencia (2 días). Lo que en primera instancia parece ser contrario al principio de publicidad claramente establecido en la ley 1150, y obstruye la participación de más licitantes. En el mismo sentido, absurdamente, los estudios previos que deben indicar la conveniencia del contrato, fueron publicados solo el 18 de Diciembre, 3 días después de cerrado el concurso (con único proponente), y apenas 5 días antes de adjudicado el contrato. Para completar, el contrato hasta la fecha suscrito, no tiene un interventor definido, a causa de las irregularidades que rodean el mismo.
Siguiendo el carrusel de desaciertos, la asesora de asuntos ambientales de la Maria mulata, termino sus días como directora del EPA adjudicando, ese mismo día 23 de Diciembre de 2010, otro debatible contrato, el número 251 para identificar los componentes de la biodiversidad amenazados en la Cienaga de la Virgen por 313 millones. Hasta ahí todo parece normal, sin embargo lo que inexplicablemente olvido la funcionaria es que dicho estudio seria innecesario.
El objeto del contrato parece ser obsoleto y la información pretendida con la millonaria inversión está al servicio de cualquier curioso e incluso habría sido presentada a la mandataria Cartagenera en el primer semestre del 2010. Lo pretendido por la EPA en dicha contratación es fácilmente reemplazable por la existencia y vigencia del Plan de Ordenamiento y Manejo de Cuenca de la Cienaga de la Virgen - POMCA- desarrollado por CARDIQUE y socializado en el mismo 2010 a través de un taller con la participación de todos los Alcaldes de Bolívar, incluida por supuesto la Alcaldesa Pinedo. En otras palabras serian 313 millones destinados a realizar algo que ya existe y a lo que podría acceder el EPA sin gastar un solo peso del erario. Esto sin contar que el propio EPA desarrollo en la vigencia 2010 un documento de zonificación del manglar que contenía que contenía parte de la información procurada por la entidad.
Hoy este contrato (251) tiene a la nueva administración de la entidad ad portas de un lio legal, generado por la inconsistencia del gasto ordenado bajo la antigua dirección de la nueva asesora de la Alcaldesa. Si la lógica prevalece el contrato deberá ser derogado, la pregunta ahora, es si la María Mulata le dará carta blanca a la nueva directora del EPA para suspender dicho contrato, cuando aquello podría afectar directamente a su asesora de despacho y por ende a su administración.
En medio de la fiesta decembrina los malos pasos de la funcionaria de la Alcaldía, a cargo del EPA, continuaron. El mismo 23 de Diciembre, apenas unas horas antes de la navidad, cuando simultáneamente se otorgaban los contratos anteriormente cuestionados en el presente artículo, se adjudico otro más por 239 millones. En medio del carnaval de contratación que se vivió aquel día, se adjudico el contrato #252 a la Unión Temporal Ruido de Cartagena, para elaborar los mapas digitales de ruido ambiental del perímetro urbano de la localidad 3, y curiosamente ligado al primero tratado en el presente texto.
Este tercer contrato fue desarrollado a través de un concurso de meritos, que solo duro 16 horas laborales, en primera instancia insuficientes, como en el primer caso, para cumplir con el espíritu de publicidad de la ley. No obstante las semejanzas, con el controvertido contrato para inventariar los arboles de la heroica, son varios. Los dos concursos fueron celebrados en las mismas fechas, a los dos se presentaron un solo proponente, en los dos casos uniones temporales, a las que se le adjudicaron los contratos también en el mismo día. Y para finalizar la casualidad máxima, en los dos casos los representantes legales de cada UT, le otorgaron poderes a un mismo señor, para legalizar los contratos. Las coincidencias entre los dos procesos, y las aparentes irregularidades de los mismos, ponen en tela de juicio la consistencia legal, administrativa y ética de aquella pareja de contratos celebrados en la recta final de la dirección de Ruth Lenes.
Los 3 contratos comparten además otras incoherencias bastante llamativas. Ninguno fue publicado en el Sistema Electrónico para la contratación pública SECOP como lo ordenan los propios documentos oficiales que sustentan la contratación. Esto acompañado de la incongruencia entre el alto número de contratistas que según la Alcaldesa participan en la contratación del municipio, y el pobre e insignificante promedio de 1.3 contratistas participantes de esta fila india de discutibles concursos en el EPA.
Así las cosas los contratos de la Entidad Publica Ambiental de Cartagena EPA aparecen como un nuevo lunar de la administración de la Alcaldesa Judith Pinedo. Quien paradójicamente, premio la irregular gestión de la ex directora de dicha institución, nombrándola como asesora del distrito. Hecho que en el ambiente del gobierno municipal parece ser un obstáculo para revelar toda la verdad de la contratación pública del EPA durante los primeros 3 años de la actual alcaldía. Situación que ha puesto a rodar en los corrillos políticos de la heroica, la posibilidad de que la actitud de la Alcaldesa, provenga de un acuerdo político con el ex candidato a la Alcaldía Cesar Anaya, quien adhirió a la campaña de Pinedo en el 2007 y se presento muy molesto a las instalaciones del Concejo municipal, el pasado Viernes, reclamándole a quienes empieza a cuestionar la entidad.
En fin esta historia, pone a pensar a más de un Cartagenero sobre el vuelo de la María Mulata, y a cuestionarse si de pronto, en las pasadas elecciones, solo vivieron una falsa ilusión. Noches de Cartagena, toda una serenata contractual….
Todo el soporte de esta investigación
*En varias ocasiones intentamos comunicarnos con la asesora de la Alcaldesa, Ruth Lenes, pero fue imposible contactarla.