Por: Manolo Azuero
En los detalles se define lo que hemos sido, lo que somos, y lo que seremos. Es por eso, que busco opinar sobre algunos detalles de la administración pública en Bucaramanga, con espíritu crítico y constructivo. Quiero objetar con vehemencia la extraña arquitectura que describiré de algunos contratistas de la Secretaria de Desarrollo Social y cuestionar, Señor Alcalde, la simpatía de esa secretaria con dichos contratistas.
Durante los últimos 5 meses de este año la Secretaria de Desarrollo Social ha considerado ideales a un grupo de 3 fundaciones distintas para otorgarles contratos por casi 250 millones de pesos. Hasta aquí todo parece regular, sin embargo detrás de la aparente normalidad, hay un grupo de personas que han decidido reformar y establecer fundaciones para ser beneficiarios de las arcas públicas y su capacidad de contratar, patrocinados por él impugnable aval de la Secretaria.
La primera fundación, FUNASTEC (Fundación de asistencia técnica y especializada de Colombia), fue creada en el 2006 con un objeto social relacionado con la gestión administrativa, financiera y tributaria de las empresas, entre otras cosas similares. No obstante, extraordinariamente la fundación registro en Abril 30 de 2010 una extraña reforma poco coherente con su nombre y objeto social inicial. La fundación tan “técnica y especializada” paso de realizar estadísticas de mercado a prestar servicios entre los que se incluyen de manera textual títeres, payasos, mariachis, mini tk, y refrigerios entre otras. FUNASTEC es representada legalmente por Doña Esperanza León, su revisora fiscal es Doña Blanca Chanaga y el miembro único de junta es Don Edinson Gamboa.
Acompañando la particular reforma de FUNASTEC, Mayo y Junio trajeron nuevas fundaciones para integrar todo un “carrusel”. En Mayo se registro FUMDICOL (fundación para el mejoramiento y desarrollo integral por Colombia), con exactamente el mismo objeto social que se incluyo en la primera fundación, con la misma redacción en donde incluyen los títeres, los payasos, y las luces para espectáculo. Su representante legal es el mismo Don Edinson de FUNASTEC y con la misma revisora fiscal: Doña Blanca. Sin embargo, el festival no paro allí. En Junio se registró la “Fundación Amigos por el Desarrollo Integral de la comunidad ONG”, con el mismo objeto social, sin cambio alguno, con la misma Doña Blanca de revisora fiscal, y Doña Esperanza y Don Edinson como miembros de junta.
Así las cosas, con tres vagones en el tren, el grupo de “fundaciones” empezó a ser seleccionado entre los contratistas hábiles de Desarrollo social, y el “carrusel” ha recibido en promedio 48 millones cada mes en contratos. ¿Cuál es el criterio para elegir los contratistas, cual es revisión que se les hace? Exijo respuesta, y que se investigue si hay o no enemigos agazapados del bien común dentro de la administración que le están dando cabida a estos carruseles fatales, al fraccionamiento de contratos, a los millones en mariachis...*Material investigativo: manoloazuero@hotmail.com
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario